¿Pilotes o micros (I)?

                        Aunque inicialmente la elección se decanta por los pilotes por una cuestión meramente económica, no siempre es cierto si se considera la ejecución de la obra en su totalidad. Llevo trabajando con pilotes durante los últimos 15 años y, si bien es cierto que la valoración inicial siempre inclina la balanza hacia ellos, la ejecución y el manejo de los materiales no siempre da el resultado adecuado. Otra cosa distinta sería hablar de los pilotes de hinca, pero estos tienen un campo de aplicación muy delimitado.

                        La diferencia económica entre el precio que se valora en el mercado entre pilotes y micros varía entre 2 y 3, dependiendo de la naturaleza del terreno y de las cargas a estimar para un terreno sin dureza considerable.

                        En el caso de terrenos duros, las empresas de pilotes emplean herramientas especiales de perforación que se facturan por horas. La “famosa” herramienta especial de widia puede tener un precio que varía entre los 200 y los 500 euros por hora, siempre a juicio del ejecutor (que, normalmente varia el precio en función de una previsión previa de horas). Si el terreno es muy duro, simplemente no se puede perforar o resulta antieconómico para la empresa ejecutora, con lo que empiezan a surgir problemas en la ejecución. Siempre.

                        En el caso de los micropilotes, excepto el paso de hormigón que se valora aparte (entre 70 y 90 euros por metro lineal) y que se hace con diamante normalmente, el precio del metro lineal engloba la perforación en casi cualquier terreno. Es más, utilizando martillo de fondo, hay máquinas que sacan más rendimiento con martillo de fondo en un terreno duro que en una arena de miga.

Seguiremos.